PODÓLOGO INFANTIL EN A CORUÑA

 

En Dedopie Clínica Podológica, en pleno centro de A Coruña, contamos con un servicio especializado de podólogo infantil para acompañar el correcto crecimiento de los pies de tus hijos. Evaluamos de forma cuidadosa su manera de pisar y cualquier alteración que pueda aparecer durante las primeras etapas de desarrollo, con el objetivo de prevenir molestias, corregir desequilibrios a tiempo y favorecer un crecimiento sano y cómodo.

 



¿Qué es la podología infantil y por qué es importante?

La podología infantil se centra en acompañar el desarrollo del pie durante la etapa de crecimiento, un momento clave para realizar controles biomecánicos y posturales. Entre los 3 y 5 años, los niños experimentan grandes cambios físicos que no siempre aparecen al mismo tiempo en todos, por lo que es fundamental vigilar su pisada, la alineación de rodillas y la postura. Detectar a tiempo desalineaciones o alteraciones en pies, rodillas o espalda permite prevenir lesiones, dolores o patologías que podrían persistir en la edad adulta.

En Dedopie, llevamos a cabo una exploración biomecánica adaptada a los más pequeños, evaluando cómo caminan, cómo apoyan los pies y cómo evoluciona su desarrollo. Este seguimiento es especialmente importante si los padres notan molestias, torpezas al caminar, cansancio, desviaciones en las piernas o cambios en la forma de pisar.

Además de los desequilibrios posturales, los niños también son más propensos a presentar papilomas, hongos y otras afecciones dermatológicas, por lo que un podólogo infantil puede ayudar a identificarlos y tratarlos correctamente desde el inicio. En Dedopie contamos con protocolos específicos para el diagnóstico de patologías del pie y de la marcha infantil, asegurando un abordaje completo y adaptado a cada niño.

¿Qué incluye nuestro servicio de podólogo infantil en Dedopie?

Valoración clínica completa: revisamos la historia del desarrollo, realizamos una exploración articular y muscular y analizamos posibles molestias o alteraciones.

Estudio de la pisada infantil: utilizamos una plataforma de presiones informatizada para observar cómo apoya el pie al caminar o al mantenerse de pie.

Evaluación del calzado: analizamos el calzado habitual del niño y recomendamos opciones adecuadas en flexibilidad, anchura y materiales.

Tratamientos personalizados: según el diagnóstico, podemos pautar plantillas a medida, ejercicios de fortalecimiento, revisiones periódicas o consejos específicos.

Educación y hábitos saludables: enseñamos a las familias cómo cuidar los pies en casa, qué tipo de calzado elegir y qué rutinas favorecen un crecimiento sano.

Beneficios de acudir a un podólogo pediátrico en A Coruña

Prevención de deformidades: permite detectar a tiempo problemas como pies planos, pies cavos, desviaciones de rodillas o marchas alteradas.

Mejor calidad de vida: ayuda a reducir molestias, caídas frecuentes, cansancio excesivo o torpeza al caminar.

Desarrollo adecuado: garantiza que el pie crezca con un apoyo correcto y acorde a la biomecánica del niño.

Tratamientos menos invasivos: al intervenir pronto, suelen bastar ejercicios o plantillas, evitando tratamientos más complejos en el futuro.

Prevención económica: evitar lesiones crónicas supone menos visitas médicas y menos tratamientos correctivos más adelante.


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Preguntas frecuentes (FAQ) sobre podología infantil

¿Cuándo debería llevar a mi hijo al podólogo por primera vez?
La primera revisión suele recomendarse entre los 3 y 5 años, etapa en la que el pie muestra los primeros signos de posibles alteraciones.
¿Duele el estudio de la pisada?
No. Es un proceso indoloro y adaptado a los niños. Utilizamos una plataforma de presiones y lo hacemos de forma amena para que colaboren sin miedo.
¿Necesitará siempre plantillas?
No necesariamente. Según el resultado del estudio, se pueden recomendar plantillas personalizadas, ejercicios o simplemente vigilancia periódica.
¿Con qué frecuencia hay que hacer revisiones?
Depende del crecimiento y de cada caso. En muchos niños, una revisión anual es suficiente para seguir su evolución.